Siendo honestos y objetivos
haciendo las emociones a un lado
no hay muchos motivos
para estar de ti enamorado.
La lógica no aplica
el amor no entiende de razones
El cerebro calcula y califica
El corazón no requiere aprobaciones
No te veo hace tanto tiempo
tu voz, hace un buen que no la escucho
¿por qué siento lo que siento?
Te pienso, me venzo y no lucho.
El corazón no entiende de distancias
ni calcula probabilidades
no puede ocultar sus ansias
a pesar de nuestras edades.
De qué sirve tanta espera
el cerebro siempre cuestiona
Este amor es de otra era
y el corazón aun se emociona.
Mi cerebro limita al corazón
lo cuestiona y pide cuentas
«se trata de un amor sin razón
borra de una vez todo lo que sientas».
Mi corazón salta y se alborota
le pide al cerebro tu imagen
entonces, de la nada, la paz brota
y ambos disfrutan del paisaje.
J. Yael Román – Oct 2014